En el imaginario popular, Florencia Peña es una mujer siempre alegre, chistosa e ingeniosa a la que nunca parece entrarle una bala. En la mañana de ayer, la actriz confesó que, luego de dos años de búsqueda, está embarazada por tercera vez, fruto de su relación con Ramiro Ponce de León. Plena, feliz, muestra su pancita y se anima a revelar el momento más oscuro de su vida.
En diálogo con revista Gente, Florencia cuenta que, tras su separación de Mariano Otero, las cosas no resultaron nada fáciles para ella: “No se bancaba mi modo extrovertido de encarar la popularidad y yo no podía torcer mi naturaleza… Ya no estaba bueno lo que éramos cuando estábamos juntos”.
Luego tomaron la decisión de divorciarse, comenzó una etapa muy dura para la actriz. El dolor era muy grande y mientras que en la pista de Bailando deslumbraba con su gracia natural, puertas adentro de su casa, la situación era dramática: “Pesaba 46 kilos. Yo me excusaba: ‘¡Dale, vamos! ¡Bailar me hace bien!’. Llegaba a casa y era otra, te juro que deseé morir… Durante un tiempo tuve un acompañante terapéutico viviendo en casa. Tomaba Zloft y Rivotril para poder salir a trabajar”.
Ahora, en pareja, feliz y a la espera de su bebé, con una sonrisa, piensa en el futuro: “Desesperada y profundamente deseo que este bebé sea una nena ¡Necesito dejar una sucesora en mi camino!”. Florencia Peña dará a luz en octubre.
Foto: gentileza revista Gente
