El hecho sucedió en un evento online entre un grupo de mujeres pertenecientes a una organización de emprendedoras y la reina Máxima de Holanda. Eran más de 100 participantes en el diálogo, que tuvo lugar a través de la plataforma Zoom. De pronto, una de las mujeres lanzó un fuerte improperio, que dejó a la monarca de origen argentino sin nada que decir.
Primero la reina se sintió sorprendida, y miraba a la sala que tenía detrás como buscando una explicación a lo que acababa de escuchar. Después, la sorpresa dio paso a la confusión, porque Máxima se encontró totalmente desconcertada.
En primera instancia comenzó hablando un moderador, que agradeció a la monarca por su presencia y le dio la bienvenida formal al evento. Luego, una de las participantes mostró su enojo con la tecnología y, sin saber que tenía el micrófono encendido, lanzó un fuerte comentario: “Kan het beter beeld worden? Of is het dit kutbeeld?”. Traducido al español, eso significa: “¿Y esta mierda de imagen? ¿No puedo hacer que se vea mejor?”.
La reacción de la reina holandesa no tardó en llegar. Ni bien termina de escuchar la frase, abre los ojos totalmente incrédula ante lo que acaba de presenciar, mientras mira a ambos lados buscando un cómplice entre sus asistentes que haya oído lo mismo que ella mientras su rostro no puede ocultar la sorpresa.
El coordinador es una de las personas que más avergonzada se siente con la situación, y se disculpa en primera instancia con la monarca. “Esto no ha sucedido en esta habitación. No sé qué pasó. Alguien no tiene una cámara nítida, supongo…”, se apresuró a aclarar a los concurrentes virtuales al evento.
Después de unos minutos de notable incomodidad, Máxima sonríe, todavía con una expresión incómoda en la cara, y responde: “Tengo que decir que no sé qué hacer. Perdónenme”. Aunque aún no se sabe quién fue la persona que hizo el comentario, sí se escuchó en la videoconferencia la voz de una mujer que, al darse cuenta que la mismísima Reina la había escuchado, pidió disculpas con una sonrisa de nerviosismo absoluto.
Otra situación incómoda
En el año 2014, en plena celebración del Día del Rey, con motivo de conmemorar el cumpleaños número 47 de Guillermo de Holanda, a Máxima le tocó vivir otra situación incómoda.
Fred de Graaf, alcalde de Amstelveen, una localidad cercana a Amsterdam, capital del país, le tocó la cola a la reina delante de miles de personas que estaban presenciando la escena y frente a quienes revivieron el desagradable hecho a partir de las pantallas.
En la filmación se ve cómo la mano del alcalde se desplaza de forma poco sutil por la cintura de la reina, para luego reposar unos segundos en su trasero. En el video se puede escuchar como un hombre que presenció la escena del otro lado de la calle grita: “¡Está tocando su trasero!”.
Más tarde, el propio alcalde se excusó. “No me acuerdo, y de ninguna manera lo hubiera hecho de forma consciente. Sé muy bien que esto no está bien”, explicó, y agregó que la perspectiva de la cámara sacó la situación de contexto.
