Sobre las 3.30 de la mañana, el Papa Francisco se comunicó con la Argentina para saludar a sus seguidores que pasaron la noche en vela en la puerta de la Catedral metropolitana.
"Que no haya odios, peleas, dejen de lado la envidia" dijo el Papa. "No le saquen el cuero a nadie, dialoguen", agregó el pontífice y le arrancó una sonrisa a la gente que lo escuchaba muy atenta.
"Que entre ustedes este deseo de cuidarse vaya creciendo en el corazón y acérquense a Dios. Dios es bueno, Dios siempre perdona, Dios comprende, no le tengan miedo", subrayó Jorge Bergoglio.
