En marzo de este año, luego de un romance muy perfil bajo, alejado de los escándalos y de una boda reservada para los más íntimos, Marcela Kloosterboer y el exrugbier Fernando Sieling fueron padres de Juana, la primera hija de la pareja.
Todo parecía perfecto. En calma. Pero el fin de semana un episodio que los allegados describieron como “brote psicótico” le dio un nuevo e inesperado giro a la historia de amor.
Según relató en televisión, a modo de primicia, Marina Calabró, la noche del viernes, ya madrugada del sábado, el marido de Marcela sufrió una crisis en su casa, que habría motivado su internación en el Hospital italiano. Aunque hay total hermetismo respecto a su situación clínica, todavía estaría allí en la habitación "2425".
La decisión de internarlo sería consecuencia de un puntual hecho de violencia del que habría sido víctima la actriz, aunque Calabró no quiso dar más detalles de la escena.
Por estas horas, Kloosterboer no ofreció ninguna declaración ni existe un parte médico oficial.
