En medio de un debate moderno en el que se discute cómo son los diferentes tipos de vínculos, Nancy Anka se animó a contar cómo atraviesa su relación con el director Ariel Basaldúa. En diálogo con La Nación, la actriz confesó que, a pesar de llevar seis años de noviazgo, optó por no convivir.
“Estoy con Ariel que es el director de Caprichos. Ya habíamos trabajado juntos en otras obras, como por ejemplo Como el culo, Chorros, Verdades mentirosas…”, arrancó a contar Anka. La artista hizo hincapié en cómo es mantener una relación con un compañero de trabajo: “Cuando nos ponemos en ese plan somos director y actriz, más allá de que todos saben que somos pareja hace muchos años. Nos es bastante fácil porque le conozco el código y sabe que, si me dice algo, yo lo entiendo y lo llevo a cabo. Entro al teatro y dejo de ser su mujer”.
Nancy reveló que con Ariel ya habían salido en el pasado: “Hace seis años estamos juntos, pero siempre decimos que hace 25 años. En ese entonces fuimos novios, y en el tiempo nos fuimos encontrando, fuimos amigos, cada uno tenía su pareja, yo me casé, me separé. Nos reencontramos hace ya varios años”.
Consultada por cómo resulta la convivencia con su novio, Nancy sorprendió al explicar que optaron por no vivir juntos. “Vivíamos muy cerca, así que decidimos que tenemos una casa de como 30 cuadras. Las cosas son cuando tienen que ser, ni antes ni después. Eso es real. La decisión de no convivir es más bien mía, pero porque siempre que me puse en pareja me fui a vivir y no resultó. Esta vez tenía que ser diferente porque encima es con él. Y la verdad es que nos funciona”, explicó Anka.
Nancy detalló que, pensando a futuro, no le cierra las puertas a la convivencia: “Yo creo que en algún momento vamos a convivir. Seguramente cuando llegue el tiempo de compartir, quizá, nuestro último tránsito de vida. De todas maneras tenemos nuestra convivencia porque yo paso mucho tiempo en su casa, viajamos y estamos todo el tiempo juntos”. Anka aprovechó para señalar cuáles son las ventajas de no vivir bajo el mismo techo. “Está bueno que cada uno pueda tener su espacio, con sus tiempos. Ya estamos grandes y cada uno tiene sus mañas y son súper respetables. Además está el deseo de vernos, de compartir, y cuando convivís te ves y compartís todo el tiempo”.
“Desde mi experiencia de convivencia, me gusta más este vínculo”, concluyó la actriz.
