Nazarena Vélez habló de sus “años de gloria” con Alejandro Fantino y recordó con detalles ese tiempo que no solo era “éxito”.
“Hoy, después de 20 años, se dan cuenta de que es verdad, sigo con los tres pibes dentro de mi casa, me fuman todo el día. Todo lo hice por mis hijos. De verdad lo doy todo por los pendejos. Cuando la gente me veía decía ‘qué buen marketing el de esta mina, como muestra la cola y dice que es por los hijos’. Pero en realidad era la verdad”, sostuvo Nazarena.
“A mí me daba vergüenza verme en sitios de noticias, o cuando veía la foto de mi cola en una revista con la frase ‘todo por mis hijos’. Yo pensaba que se cagaban de risa, pero todo lo hacía por mis hijos, de verdad”, agregó.
Y luego, se metió con lo más oscuro de su pasado: “Estaba empastillada a más no poder, tenía la obligación de estar flaca, vivía drogada todo el tiempo. Yo elegí el camino más fácil para estar físicamente como me exigía la carrera, que era estar anoréxica. Yo la pasé mal en serio, y la gente pensaba que la pasaba bien”.
“Si yo jugué con fuego, me tengo que hacer cargo también de quemarme. Empecé a los 14 años en el medio, trabajando con Gerardo Sofovich en Polémica en el bar. Yo sabía dónde me metía. Era ciento por ciento exposición, mostrando la cola con 14 años. Todo el mundo hablaba de mí y yo lo sabía. Pero económicamente me generaba algo. Estaba súper tranquila viniendo de Quilmes en colectivo con guardapolvo blanco para pagar menos el boleto, y en lo de Gerardo me vestía impecable”, cerró Nazarena.
SU RELACIÓN CON AGOSTINI
Daniel Agostini y Nazarena Vélez estuvieron casados siete años. Su relación comenzó en 1999 y terminó en 2007 cuando se separó en medio de un escándalo. Celos y acusaciones los llevaron a estar en las principales tapas de los diarios en esa época en un gran momento de la carrera de ambos. Sin embargo el tiempo pasó, y con un hijo común, el Chyno, pudieron limar asperezas.
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"Nos llevamos bien, gracias a Dios bien. Tenemos un diálogo muy amable, logramos cerrar algunas heridas", empezó diciendo Nazarena en diálogo con Juan Pablo Godino.
En esa misma línea, agregó: "Habló por mí obviamente, logré cerrar algunas heridas... Y yo lo quiero y respeto mucho. Sé que está muy presente en la vida de su hijo y eso me hace feliz. No tengo más que palabras de elogios para Daniel. Estuve casada seis años con Daniel, hoy estoy muy bien con él, pero me costó mucho entender un montón de cosas de sus actitudes, y me imagino que a él le pasó lo mismo", remarcó.
Ya a mediados de este año, Nazarena hizo un mea culpa sobre cómo llevó adelante su vínculo con el papá de su hijo: "Me arrepiento un montón de haberme peleado en público con el papá de mi hijo, con Daniel". En este momento, ambos se encuentran en un momento muy distinto de su vida. Nazarena se encuentra en pareja hace más de un año con Santiago Camaño y durante la cuarentena obligatoria, pasó momentos junto a sus tres hijos. Agostini por su parte, cosechó un bajo perfil dedicado a la música.
