Luis Miguel, una vez más, es protagonista de un escándalo internacional. El las últimas horas, el cantante mexicano fue detenido en Los Ángeles (Estados Unidos) tras haberse negado a comparecer ante los tribunales estadounidenses en el marco del conflicto judicial que mantiene con su exrepresentante William Brockhaus.
Según los documentos judiciales del caso, un tribunal de Los Ángeles advirtió al cantante el pasado 24 de marzo de que, si no se presentaba ese mismo día en la audiencia que estaba prevista en la ciudad californiana, se notificaría a las fuerzas de seguridad para proceder a su detención.
Lo cierto es que Brockhaus exige en su demanda a Luis Miguel una indemnización de algo más de un millón de dólares, incluyendo intereses y los honorarios de los abogados, por incumplimiento de contrato cuando ejercía como representante del músico entre 2013 y 2015.
