Ofrecen trabajo en Mendoza para 10 mil personas, pero solo se anota la mitad. Los productores vitivinícolas de la provincia de Mendoza tienen una gran preocupación con la cosecha de 2021, ya que la pandemia mantiene frenada la posibilidad de que los trabajadores “golondrina” puedan llegar. Es por ello que en la provincia apuntan a la mano de obra local “en blanco”.
Pero a pesar de esto, la realidad supera todo lo conocido, porque los 10 mil desocupados mendocinos que busca tentar el Gobierno de la provincia para las tareas en las fincas con un programa de capacitación, solo contó con la mitad de los registrados, lo que deja en evidencia el bajo interés de los trabajadores en querer ser parte de la vendimia del próximo año.
De acuerdo con la información publicada por La Nación, el problema principal que impide que las personas se sumen a la propuesta de un empleo formal en este sector son los planes sociales que otorga el Gobierno nacional, ya que los beneficiarios temen quedarse sin la asistencia después que finalicen sus actividades en los campos.
Es por ello que una buena cantidad de cosechadores termina acercándose a los empleadores para ejecutar las tareas, pero piden que sea en negro, lo que representa un verdadero riesgo para todos los actores de la cadena.
En la Casa de Gobierno provincial aclararon que "es una realidad, hay muchas personas con grandes temores a quedarse sin la asistencia social, y a último momento deciden qué les conviene hacer. Se trabaja lo más posible con Anses, para que hagan la reactivación rápida del plan, pero no siempre sucede. El problema, por ahora, sigue siendo la imposibilidad de que lleguen los ‘golondrinas’, por eso apuntamos a la mano de obra local, pero está difícil".
El programa “Reinventa”, que fue lanzado hace un mes con el objetivo de conseguir 10.000 trabajadores locales que deben capacitarse, cuenta con solo 5.000 inscriptos, de los cuales 3.500 tienen experiencia. El resto deberá capacitarse para adquirir los conocimientos que necesitan.
