Guido Kaczka ya está acostumbrado a que, en más de una ocasión, los participantes de Otra noche familiar carguen con historias de vida difíciles y sufridas. Pero la de Mónica y Edgardo, el matrimonio cordobés que lleva 35 años de casado y que anoche ganó en el juego del Pantano, emocionó a todos por lo que les tocó enfrentar y superar.
Edgardo se subió a lo alto de la plataforma con trampa que se encuentra por encima del Pantano, y Mónica se dispuso a contestar las preguntas para obtener el premio mayor: unas vacaciones por diez años en un hotel de lujo de Punta del Este, además de una orden de compra en un supermercado.
Sin necesidad de utilizar ningún comodín, Mónica fue acertando una por una las preguntas que el conductor le iba formulando. En un momento, Guido le preguntó cómo se preparó para el concurso, a lo que la participante contó que se había anotado en un cuaderno las preguntas que no sabía responder, y que su esposo le había “tomado lección”.
Además, como suele suceder, el conductor también le preguntó a Mónica sobre su familia y cómo estaba compuesta. Pero la respuesta impactó en todos los que estaban en el programa: “Un beso al cielo a nuestro hijo Fernando, que falleció de cáncer hace unos años. Por eso yo te decía que me han pasado buenas y malas. Esa fue bravísima”, le contestó, y agregó, con las lágrimas a flor de piel: “Él está acá ayudándonos”.
Por fin, llegó la última pregunta: “¿Cómo fue más conocido el jefe de estado yugoslavo Josip Broz?”, lo que Mónica respondió correctamente: “El Mariscal Tito”. A continuación, Guido los declaró ganadores del concurso, por lo que la participante confesó sus nervios: “Es la primera vez que participo en televisión y fue la primera vez que dije ‘yo puedo’”, finalizó.
