Lorenzo, el menor de los hijos de Marcelo Tinelli, sin dudas es el más mimado de la familia. Esta vez, recibió un regalo muy especial de manos de Fernando Burlando y Barby Franco: una réplica de un Lamborghini blanca que él mismo puede manejar.
Ubicado en la mini-butaca de cuero negra, Lolo — con tan solo un añito— ya se prepara para convertirse en un gran conductor. Sin temor a la velocidad, el nene pone su piecito en el acelerador y así, al volante de su lujoso coche, recorre el living de su casa.
El problema es que Lolo todavía no tiene muy claro eso de la "marcha atrás", así que, por las dudas, ¡abran cancha! ¡Despejen el área! Porque llega Lolo a bordo de su primer auto.
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