Toti Giménez, el su productor musical y expareja de Gilda, le contestó a Gladys “La Bomba Tucumana”, por sus dichos acerca de que “Gilda no habría sido una número uno, de no haber sido por el accidente”. “Con los mitos no hay que meterse, puede salir caro”, le advirtió. En entrevista con el programa “Por Si Las Moscas” conducido por Moskita Muerta y Nilda Sarli, consideró que “Gladys se equivocó, creo que no es una mala mujer”.
El productor expuso que “yo una vez hablé de que estábamos en un impass en la relación con Gilda, cuando falleció, y se me vinieron todos encima, y aprendí que no podés meterte con los mitos”. “Lo peor que le puede pasar a Gladys, es que el día de mañana haga un show y en vez de aplaudirla, le griten aguante Gilda”, hipotetizó. Y reflexionó que “la conclusión es que no te metas con un mito, no podés meterte con un mito, después pagas las consecuencias”.
“Está haciendo una movida de prensa, porque tiene que promocionar un disco”, expresó en diálogo con La Once Diez, sobre los dichos de “La Bomba Tucumana”. En este sentido, explicó que “la mejor promoción que podés hacer de tu disco es que tu disco sea bueno, no creo que te vaya bien con tu disco por hablar mal de otro”.
Asimismo, recordó que “no es la primera vez que dice algo de Gilda, y yo le contesté en ese momento: ‘No te hagas problema que nadie te va a hacer santa’, porque no es algo que le pasa a todos los que mueren”.
“No es marketing, ni es que lo hacemos a propósito”, aseguró. Al tiempo que comparó que “cuando murió Eva Perón, pasó también que la santificaron como Santa Eva, yo soy cristiano y coincido, yo no venero imágenes, es así”.
Rememoró así que “Gladys de Gilda dijo dos cosas, la primera que ella nunca la saludó, y la segunda que Gilda tenía varias operaciones en el rostro”. “Sólo la primera es cierta, porque nunca la cruzamos, por eso no la saludó, sólo la crucé una vez yo”, la desmintió.
Por último, sobre los dichos de “La Bomba”, en cuanto a que Gilda no habría sido la ídola que terminó siendo, opinó que “yo siempre la vi así, desde que la conocí en 1990, yo sabía que de alguna manera íbamos a llegar, y no me equivoqué”. “Lamentablemente no lo pudimos ver los dos juntos, pero creo que no me equivoqué”, finalizó.
