El ambiente estaba caldeado y, por eso, el encuentro entre Brian Lanzelotta y Martín Amestoy en BDV (Magazine) prometía, al menos, polémica. Pero terminó en escándalo cuando casi se agarran a piñas. Mariana Brey —conductora del ciclo de espectáculos— nos contó todo lo que no se vio del cruce pero, además, nos revelo el pacto secreto que, con apretón de manos incluido, cerraron los protagonistas de esta historia.
Brey nos contó que, el viernes pasado, Amestoy dio el puntapié inicial del conflicto al criticar a Brian y sacar a relucir un hecho del pasado: un tuit en el que Marian Farjat (actual pareja de Brian) le había "tirado onda". Al encontrarse en el estudio de tv, Brian increpó a Amestoy: "A ver si te bancás lo que dijiste".
La periodista nos dijo: "El enojo de Brian era genuino, no era una estrategia mediática. Estaba enojado en serio, no estaba actuando. De hecho, si la pelea hubiera sido en la calle en lugar de en un estudio de televisión, habría terminado de otra manera. Por eso Amestoy tuvo razón en levantarse e irse al control hasta que la situación no se calmó".
Luego de un bloque en el que Brian manifestó las razones de su enojo con Amestoy (entre ellas que lo trate despectivamente y que, según su entender, le faltara el respeto a su novia), Amestoy regresó al estudio: "Para que vuelva al estudio le pedimos a Brian que no se moviera del sillón. La condición para que pudieran hablar cara a cara era que permaneciera sentado. No queríamos que llegara a un enfrentamiento físico".
EL PACTO
Pero luego del escándalo, hubo un momento en el que ambos decidieron cerrar un pacto de caballeros, sin agresiones ni físicas ni verbales. Un momento en el que la razón primó por sobre el instinto: "No salió al aire, pero en otro de los cortes, Brian se sentó al lado de Amestoy y ahí hicieron un pacto", relató Brey y agregó: "Brian le dijo: 'vos no hablás nunca más de mí y yo no hablo nunca más de vos. Yo no existo más para vos', el pacto que le estaba proponiendo era la indiferencia".
Tras el correspondiente apretón de manos, Mariana Brey les pidió que se dejaran tomar una foto juntos. Pero la caballerosidad es una cosa y el olvido, otra. Ninguno de los dos aceptó posar con el otro.
