Soledad Fandiño reconoció los cambios de planes que tuvo que hacer con su hijo Milo tras haberse contagiado coronavirus.
La actriz contó que vivió la enfermedad con mucho miedo, así que tuvo que pedirle ayuda a René Pérez para reorganizarse con el nene que tuvo cuando estaban en pareja.
Soledad explicó sobre el contagio del covid-19 que “el primer síntoma fue la pérdida del olfato, por eso dije ‘esto es COVID, directamente me fui a hisopar, le avisé a todo el mundo antes de que me diera positivo y me quedé en mi casa”.
“Me dieron el alta y empecé a entrenar -yo entreno tres o cuatro veces por semana. El médico me había dicho que vaya de a poco, una se confía y ahí empecé con una leve tosecita, a sentirme medio cansada la primera semana. Por suerte, gracias a Dios no me agarró nada fuerte”, explicó la modelo entrevistada por Nilda Sarli y Moskita Muerta por La once diez.
La conductora aclaró que mientras ella estaba enferma, "mi hijo estaba de viaje en lo de su padre, tenía que volver a Argentina porque había estado con él desde las fiestas, pero tuvimos que correr todo, no lo iba a exponer a una situación que era inviable”.
"Recibí de los demás buena onda. Mis vecinos del edificio, vecinos que no conozco, escribiéndome por whatsapp qué necesitaba”, agradeció Soledad.
Fandiño reflexionó sobre su presente profesional: “Trabajar como conductora al lado de Guillermo Andino, que ayer estaba cumpliendo el año número 35, imaginate: para mí es un lujo estar al lado de él".
"Aparte, es un señor, un profesional, es una persona generosa que me da lugar, que me acompaña, que está ahí presente”, cerró la modelo.
