Un fanático se metió en una carrera de caballos y casi muere aplastado. Recientemente se llevó a cabo la Copa Wellington, en Nueva Zelanda, en donde se desencadenó una situación inimaginable que se hizo viral a través de las redes sociales, ya que una carrera de caballos pudo haber terminado en un desenlace catastrófico después de que un fanático se colara dentro de la pista.
Cuando solo faltaban unos 150 metros para que culminara una de las carreras del día en el Hipódromo de Auckland, un espectador tomó la riesgosa decisión de meterse a la pista, se ubicó delante de los competidores que se acercaban a toda velocidad y se quedó quieto durante unos segundos. Por fortuna, los corredores tuvieron buenos reflejos y lograron desviar el rumbo de los caballos para que el hombre resultara ileso.
Tras esto, al darse cuenta de que no fue aplastado por los corredores, el sujeto levantó los brazos en modo de celebración para que la gente del público lo felicitara después del semejante shock causado por esta irresponsabilidad. Este hombre, que casi pone en peligro la vida de los corredores y los animales, terminó detenido por la Policía y también fue multado por poner en peligro la seguridad pública.
Después del hecho, las especulaciones no tardaron en aparecer, pintando los escenarios de lo que hubiera pasado si el hombre hubiese sido impactado por uno de los caballos de carrera que, en la recta final, suelen alcanzar los 60 kilómetros por hora y que pesan cerca de 500 kilos. El jockey Danielle Johnson declaró: “Un impacto podría haber sido fatal. Tuvimos suerte de no pisarlo. La mayoría no lo vio hasta el último tramo”.
Esta no es la primera vez que ocurre un suceso de esta magnitud en Nueva Zelanda, ya que, en octubre de 2020, una pelota de golf cayó dentro de la pista de carreras y una persona ingresó a la misma con un palo para pegarle. A continuación, los corredores que llegaron a la recta final se llevaron una la sorpresa; aunque lograron esquivar al golfista.
