Un fisicoculturista de Florencio Varela se recuperó del coronavirus tras dos meses en terapia intensiva, pero bajó 50 kilos y perdió sus músculos. La vida de Raúl Gutiérrez, de 36 años, siempre estuvo enfocada en seguir un entrenamiento duro y partidos de fútbol. A pesar de su contextura física y su fuerza, el Covid-19 lo atacó sin piedad y lo mantuvo en una ardua lucha en donde estuvo 64 días en terapia intensiva, 60 de ellos pendiente de un respirador artificial.
Gutiérrez estuvo sometido durante dos meses a un esfuerzo médico desplegado por un equipo de profesionales del Hospital El Cruce, de Florencio Varela, en donde recibió a su familia, quienes relataban día a día con esperanza los avances de salud de este deportista.
En medio de este tiempo de incertidumbre, Raúl perdía peso y su novia, dos hijas, padres, hermanos, amigos y alumnos no salían del asombro ante la gravedad de la situación. Su estado de salud se descalabraba y, a pesar de esto, los médicos no renunciaban a la idea de salvarle la vida. Le practicaron dos cirugías de pulmón. Y al menos tres veces, Raúl estuvo al borde de la muerte.
Pero el pasado 9 de agosto, los médicos le comunicaron a la familia de Raúl que después de una larga lucha, el fisicoculturista por fin había abierto los ojos. Su novia Alejandra Zabala, relató: “Salté de la alegría, lloraba de la emoción, le avisé a los padres y a los amigos. Dios escuchó las oraciones que salieron de mi corazón”.
Después de haberse recuperado poco a poco, Raúl relató: “Pesaba 100 kilos y, por el virus, perdí casi 50. Hoy estoy muy agradecido al Hospital El Cruce. Gracias a ellos, pude volver a estar con mi familia y avanzo día a día”.
Ahora el objetivo es activar de a poco la musculatura respiratoria y ayudar a utilizar de forma eficiente los pulmones. El especialista encargado de este caso explicó: “Estamos estudiando qué secuelas deja el virus y los tratamientos recibidos. Raúl ahora hace terapia kinesiológica”.
