Un subte decidió cuidar a los pasajeros borrachos instalando asientos especiales para evitar que las personas alcoholizadas puedan caer a las vías.
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Si todas las ciudades piden que quienes tomen alcohol regresen a sus hogares en transportes públicos en lugar de manejar sus propios autos, en Osaka, Japón, también se tuvo en cuenta el riesgo de accidentes a la hora de subirse al metro.
Para evitar inesperadas caídas de los andenes, el ente que administra la red de subtes de esa urbe japonesa decidió cambiar el sentido de orientación de los asientos de las estaciones para colocarlos en paralelo a las vías.
En general, en todos los subtes del mundo, estas butacas están instaladas mirando hacia las vías, pero en las estaciones de Osaka, los asientos tienen apoya brazos y fueron girados 90° para estar en paralelo a las formaciones.
El objetivo es proteger la vida de los pasajeros, principalmente de aquellos que tomaron de más.
Los casos que llevaron a tomar la medida
“El motivo principal es evitar que las personas alcoholizadas caigan a las vías. Antes de su colocación, tuvimos varios casos de pasajeros borrachos que estaban esperando el tren sentados, que se levantaron al verlo llegar y terminaron cayendo del andén a las vías”, explicó un representante del operador ferroviario local, West Japan Railway Company, consultado por el medio SoraNews24.
Las autoridades decidieron optar por este sistema, ya que por una cuestión de espacio, no se podía instalar en todas las estaciones un mecanismo automático de doble cierre de puertas para bloquear el acceso a las vías y que solo se abre cuando el tren está detenido en una estación.
Por ahora, la idea tuvo resultado, ya que el número de accidentes ocasionados por el elevado consumo de alcohol se redujo notablemente.
