El laboratorio alemán BioNTech y su socio estadounidense Pfizer pidieron la aprobación condicional de su vacuna contra el coronavirus a la Agencia Europea del Medicamento (EMA), luego de que Moderna, su competidora, obtuviera la aceptación de la institución.
Así lo indicaron este martes las dos farmacéuticas y sostuvieron que la solicitud completa el proceso de revisión de la vacuna, que se inició el 6 de octubre. La compañía alemana confirmó que si se autoriza el fármaco podría empezar a utilizarse antes de fin de año en Europa.
“Si la EMA decide que las ventajas de la vacuna candidata son mayores que sus riesgos en la protección del Covid-19, recomendará que se le otorgue una CMA (autorización condicional para ser puesta en el mercado) que podría potencialmente permitir la utilización del BNT162b2 en Europa antes del fin de 2020”, indicaron en el comunicado.
La Agencia Europea comenzó a examinar las solicitudes de uso “condicional” de las vacunas contra el coronavirus producidas por la farmacéutica Moderna, como así también la de Pfizer y BionNtech.
Sin embargo, la institución informó que el análisis de estas solicitudes llevará varias semanas y no se espera respuesta de la autorización “como mínimo” hasta finales de este mes, debido al tiempo que implica estudiar toda la documentación presentada por las compañías para que su vacuna pueda ser vendida en la Unión Europea.
La distribución de la vacuna de la farmacéutica alemana y estadounidense será todo un reto, porque debe mantener una temperatura inferior a los menos 70 grados centígrados. Sin embargo, las dos compañías informaron que desarrollaron un sistema de transporte con sus propios refrigeradores para permitir una distribución exitosa.
Además, la vacuna contra el coronavirus demostró ser efectiva en un 95 por ciento y tiene que ser aplicada en dos dosis para asegurar la inmunidad contra el Covid-19.
