Vivía en una casilla del Gran Buenos Aires sin agua ni luz y hoy habla siete idiomas, da clases en la Universidad de Oxford y hasta se dio el lujo de llevar a Diego Maradona a dar una charla en esa prestigiosa casa de altos estudios británica. Para Esteban Cichello Hübner, nacido en La Falda, Córdoba, nunca existieron límites en su objetivo por conquistar el mundo, ya que siempre creyó que, con esfuerzo, todo era posible.
Desde los nueve años empezó a trabajar, después de que su mamá se separó de su papá y, con su hermano, se mudaron los tres a una casilla en la zona de Lomas de San Isidro, en el Gran Buenos Aires, cuando el barrio comenzaba a poblarse de grandes mansiones, pero la suya no tenía piso, luz, agua, baño ni tampoco cocina. Esteban trabajaba en la Despensa Lolita en un horario que lo obligaba a hacer todo rápido para llegar al colegio. En este lugar limpiaba las heladeras, acomodaba cajas y envolvía huevos con papel de diario.
Esteban siempre estuvo ávido de conocimiento, sobre todo con las palabras y el diccionario. En la actualidad, desde su departamento en Oxford, ironiza: “¿A quién se le ocurre ser pobre en un barrio de ricos? El ábrete sésamo de mi vida fue la lectura. Yo me rehusaba a ser pobre de palabras. Los diccionarios me apasionaban. Como no me alcanzaba el dinero para comprarlos, me puse a juntar unos cables negros, los quemaba y, después, vendía el cobre que quedaba. Con eso, un día, me compré un diccionario de inglés”.
Además, una vecina de la casilla en que vivía Esteban y su familia, llamada Fernanda Fernández, tenía unos discos de vinilo con los que podía aprender inglés, un idioma que llamó su atención. Esteban los descubrió y le rogaba con insistencia que por favor los pusiera.
En 1987, Esteban terminó el secundario especializado en Letras. Culminó cursando en el turno noche del Colegio Nacional Juan José Paso, en el barrio de Once. Allí, un profesor de Geografía le despertó la pasión por los mundos lejanos. “Uno tiene que viajar primero por los países de donde es su sangre”, y el joven comenzó a pensar en sus sueños por Italia, Israel y España.
Esteban cuenta ahora con tres carreras. Viajó por 82 países y no para de estudiar. Habla español, inglés, francés, italiano, portugués, alemán, hebreo y un poco de árabe. Es profesor en Oxford y director de programas especiales. Pero como si esto no fuera suficiente, se dio el gusto de llevar a Diego Maradona en 1995 a dar una clase en su misma universidad, un mérito que fue muy difundido en los medios de nuestro país.
