Zulma Lobato siempre se mostró con sus caniches, que la acompañaron hasta en sus peores momentos. Como es una amante de los animales, se mostró muy conmovida con la situación de los carpinchos en Nordelta y le comunicó a su manager que quiere adoptar uno para poder cuidarlo y que la acompañe, al igual que sus perros.
“Ella está bien pero con ganas de trabajar. Está conmovida por la situación de los animales y me contó que le encantaría adoptar un carpincho”, contó Lautaro Reyes, su mánager a TN Show, sobre el sueño que tiene Zulma de proteger a esos animales.
Este deseo de la actriz se conoce después de que expresó sus ganas de radicarse en España para continuar su carrera en el espectáculo, ante la dificultad de conseguir un papel en Argentina. “Hasta Almodóvar me conoce. Ya que acá no me quieren dar trabajo como actriz, me iré a probar suerte allá y si me va bien, me quedo. Todos los días me paran por la calle y me preguntan cuándo voy a volver a la televisión. Pero no es algo que yo maneje”, había expresado Lobato hace algunas semanas en Crónica.
BARASSI Y SU EXPERIENCIA CON LOS CARPINCHOS
Darío Barassi contó con el humor que lo caracteriza cómo fue su primer encuentro con un carpincho, cuando se acababa de mudar a Nordelta, bastante antes de que estallara la polémica de estos últimos días.
En diálogo con Telenoche, el conductor de 100 argentinos dicen reveló que, el día que se le metió uno en el jardín de su casa, se asustó tanto que decidió encerrarse con su hija en una habitación a rezar.
“Hace dos días se metió un carpincho en la casa. ¿Saben lo que es un carpincho? Es una rata obesa. Es el roedor más grande, lo googleé. Porque en vez de sacarlo, entré, me encerré en el cuarto y lo googleé (risas). La agarré a mi hija, me encerré y puse ‘Siri, qué es un carpincho’”, contó en uno de sus programas de preguntas y respuestas.
“Estaba pensando en tu descargo sobre el tema ‘carpincho’, que da como para hacer un stand up con ese tema”, le comentó la movilera del noticiero.
“No, es que te juro que lo voy a pensar, lo voy a escribir a futuro. Lo que pasa es que yo tuve dos momentos en la etapa carpincho. Porque yo, en donde vivo ahora, que es Nordelta, me mudé y, al mes, ya me apareció un carpincho. Y mi primer encuentro con la vaca peluda fue como ‘estoy complicado’, y fue cuando pasó que me encerré, empecé a rezar, llamé a la guardia, vino el guardia y se fue. Estaba en el parque y daba vueltas alrededor de la pileta, yo estaba solo con la enana, faltaba mi mujer, que es la que aporta lógica y experiencia a mi vida. Emilia estaba que lo quería tocar, yo no, ‘yo soy carpincho, Pipi, tocame a mí’, yo hacía de carpincho, complicado… Y ahora, como hay abundancia de bichos, los veo todos los días y me voy acostumbrando, ya casi que somos amigos”, contestó el humorista.
