Susana Giménez regresó a la Argentina en un vuelo proveniente de Miami, acompañada por su hija Mercedes “Mecha” Sarrabayrouse, quien fue operada tras sufrir una fuerte caída en el garage de su casa. El aterrizaje se produjo después de una larga jornada de viaje, y la llegada de la conductora generó un gran revuelo en el aeropuerto.
“Horrible, la verdad que te pase algo afuera... Esas caídas tontas que terminan en esto. Yo pensé que se había matado”, expresó Susana en diálogo con el notero de Puro Show. Si bien la diva se mostró preocupada por la situación de su hija, no perdió la simpatía y habló con los medios presentes, y además, se tomó fotos con sus fans.
Mecha, por su parte, evitó hacer declaraciones y se cubrió el rostro al notar la presencia de las cámaras. La hija de la diva, fue trasladada por personal del aeropuerto y rápidamente ingresada en el auto que las esperaba para llevarlas a su hogar.
El mal momento de la hija de Susana Giménez tras la caída
La caída que sufrió Mecha resultó en una fractura con desplazamiento, lo que requirió una operación inmediata. “De casualidad, estaba mi médico allá, pero él no tiene licencia americana, así que la operó un profesional estadounidense”, detalló Susana sobre la intervención quirúrgica. Ahora, su hija iniciará un proceso de rehabilitación en la Argentina.
Durante su arribo, Susana se mostró cansada, pero atenta a la prensa y a los fanáticos que se acercaron a saludarla. “Estoy agotada, entre llevar dos carteras, la silla, el andador...”, comentó con su clásica espontaneidad. Sin embargo, evitó responder preguntas sobre temas de actualidad o polémicas mediáticas, prefiriendo enfocarse en el estado de salud de su hija.
Sobre su futuro en la televisión, la diva dejó la puerta abierta a nuevas posibilidades, pero sin confirmar ningún proyecto concreto: “Ni idea lo que voy a hacer de mi vida”, respondió con sinceridad.
Por el momento, Susana se quedará en Argentina para acompañar la recuperación de Mecha, quien deberá seguir un estricto tratamiento para rehabilitar su cadera. La relación entre madre e hija siempre ha sido muy cercana, y esta situación demuestra que Susana está dispuesta a poner todo en pausa para estar junto a ella en este desafiante momento.
