Los Socios del espectáculo revelaron detalles del acuerdo prenupcial que firmó Máxima Zorreguieta antes de contraer matrimonio con Guillermo Alejandro. Y hablaron del difícil momento que podría atravesar con sus hijas si se concreta el divorcio con el Rey de los Paises Bajos.
“Si se separan, Zorreguieta no tendría la posibilidad de vivir con sus tres hijas. Y perdería la posibilidad de hacer cualquier tipo de reclamo ganancial. Ya que no tiene posesión ni dominio sobre los bienes, ya que estos pertenecen a la corona”, contaron.
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Además que “tremendo lo de los hijos porque se repiten todas las realezas. No pueden quedarse los hijos”.
De esta manera, en caso de divorcio, Máxima perdería la posibilidad de vivir con sus hijas, la Princesa Catharina-Amalia, la Princesa Alexia y la Princesa Ariane. Ya que quedarían bajo la custodia exclusiva del Rey Guillermo y permanecerían en el seno de la Casa Real holandesa.
La historia de amor de Máxima Zorreguieta y Guillermo Alejandro
La historia de amor entre Máxima Zorreguieta, una economista argentina, y el entonces Príncipe Guillermo Alejandro de los Países Bajos comenzó de manera inesperada en 1999. Un amigo en común los presentó en la Feria de Abril de Sevilla, España. La conexión fue instantánea, a pesar de sus diferentes orígenes y culturas.
Su relación no estuvo exenta de desafíos. El padre de Máxima, Jorge Zorreguieta, había sido ministro de Agricultura durante la dictadura militar argentina de 1976 a 1983. Esto generó controversia en los Países Bajos, donde la familia real defiende los valores democráticos.
A pesar de las objeciones, Guillermo se mantuvo firme en su amor por Máxima. El 30 de abril de 2001, anunciaron su compromiso. El Parlamento holandés, tras un intenso debate, aprobó la ley que permitía a Máxima convertirse en reina consorte.
El 2 de febrero de 2002, se casaron en una ceremonia civil en la Beurs van Berlage de Ámsterdam, seguida de una boda religiosa en la Nieuwe Kerk.
Desde entonces, Máxima y Guillermo han formado un matrimonio sólido y querido por el pueblo holandés. Han tenido tres hijas: la princesa Catharina-Amalia, la princesa Alexia y la princesa Ariane.
Máxima se ha ganado el respeto por su inteligencia, carisma y compromiso con diversas causas sociales, como la inclusión financiera, la microfinanzas y la protección de los derechos de la infancia.
La historia de Máxima y Guillermo es un cuento de hadas moderno que demuestra que el amor puede superar las barreras y que la unión de personas de diferentes orígenes puede crear algo hermoso y duradero.
Su ejemplo inspira a personas de todo el mundo a creer en el poder del amor y la comprensión para construir un futuro mejor.
