Natalia Oreiro confesó que no soporta trabajar con chicos, en una entrevista que mostraron en Socios del espectáculo, a raíz de su reciente participación en la película “Vacaciones con mamá”, donde estuvo con 30 menores.
“Natalia Oreiro sigue demostrando que es una mujer muy exigente a la hora de trabajar, por lo cual ha sido criticada por muchos colegas y muchas veces la han gastado también por eso, porque es una mujer trabajadora, ella labura y es seria a la hora de trabajar. Es seria, porque puede ser profesional y también tener un poco de onda”, empezó contando Rodrigo Lussich, para luego mostrar la entrevista que le hizo Sebastián Wainraich en Urbana Play.
“¿Cómo es grabar con 30 pibes?”, le preguntó el conductor. “Yo me quería matar, porque a mí no me gusta trabajar con pibes, nunca me gustó. Primero, porque pienso que los pibes tienen que estar jugando a la pelota o a lo que quieran”, le contestó.
“Pero pará, ¿vos querías hacer una película así?”, le consultó Wainraich.
“No, no. A mí me encantaba. ¿Se acuerdan de ‘Cuenta Conmigo’? Yo era fanática. También de ‘Los Goonies’, todo ese tipo de películas. Veía las películas de los Parchís y me volvía loca también de chica. Pero por eso quería hacer una película para chicos. O con chicos, porque en realidad es una película familiar. Pero trabajar con ellos, no, porque no le podés pedir nada. Yo soy muy exigente. Por el tema de la letra, ¿viste?”, se sinceró.
“Hay que tener paciencia”, acotó Sebastián. “Mucha, mucha. Y debo reconocer que la pasé muy bien”, reconoció.
La confesión de Natalia Oreiro
“Pero a tus compañeros adultos, ¿sí? Te dicen ‘che, sos brava en eso’”, le consultó.
“Bueno, depende con el ojo que lo mire. Yo considero que soy brava por eso. Yo soy muy exigente conmigo. Yo, hace muchos años que trabajo, he trabajado con todo tipo de actores. Me acuerdo de trabajar con Suar y un día lo agarré de los pelos y le dije ‘basta’. Hacíamos una novela juntos. Mi personaje lloraba, le abría la puerta llorando y él tenía que decir un texto. Y la quinta vez que no le salía, lo agarré de los pelos y le dije ‘basta, o me decís el texto o me voy a mi casa’. Y era el jefe”, recordó Oreiro.
“Sí, yo estaba ahí. Yo era el psicólogo en ese momento, en ‘Solamente vos’. Y un día, yo me acuerdo, vos no te acordás, pero un día nos dijiste ‘ustedes improvisen, hagan la boludez que hacen y yo entro después y decimos la letra bien’”, la chicaneó.
“Bueno, así soy”, cerró Natalia.
