Este otoño invierno no se trata solo de abrigarse: se trata de hacerlo con estilo y con comodidad. Las tendencias de moda bajaron del podio la rigidez y le hicieron lugar a siluetas más sueltas y prendas que se adapten a cualquier plan y son ideales para usar los 7 días de la semana.
El protagonista inesperado de esta temporada es el pantalón de terciopelo. Lejos de ser una pieza de ocasión, el pantalón de terciopelo se adapta a los siete días de la semana con una facilidad que sorprende: modelos amplios tipo palazzo para el día, estilo jogger para momentos relajados y cortes sastreros para el trabajo.
Lo que hay que tener en cuenta es el color. En tonos neutros como beige, chocolate, gris topo o negro, el terciopelo gana carácter urbano. El verde musgo, el bordó o el azul noche son colores más fashions. La clave es elegir un modelo que fluya con el cuerpo y que permita combinarlo tanto con una remera básica como con una camisa o un sweater oversize.

Cómo usar este pantalón para estar a la moda
Para quienes tienen un estilo clásico, el pantalón de terciopelo encuentra su mejor versión en cortes rectos o sastreros, combinados con camisas blancas, blazers y mocasines. En tonos neutros como negro, gris o beige, este pantalón puede reemplazar sin esfuerzo al típico de gabardina o traje. Es ideal para el trabajo o para una cena formal sin caer en lo obvio.
Las que prefieren un look más bohemio o relajado pueden optar por modelos amplios, tipo palazzo o pijama, en tonos tierra, bordó o verde musgo. Combinados con sweaters oversized, chalecos de punto o camisas con estampas sutiles. Además van bien con botas texanas o zapatillas de lona.
Para las amantes del estilo urbano o minimalista, el terciopelo también se adapta. Estos pantalones, más ajustados pero sin apretar, funcionan perfecto con remeras lisas, camperas puffer o trenchs livianos. En colores más oscuros como azul noche o petróleo, combinan con zapatillas blancas o borcegos.