En La mejor elección se produjo una situación típica que ocurría en los boliches cuando se pasaban lentos. Los temas románticos eran el momento indicado para que los caballeros tomen coraje e inviten a bailar a la chica que los cautivó durante toda la noche. En este caso, la diferencia fue que Sebastián y Micaela llegaron al lento luego de haberle dicho sí al chape.
Cuando comenzó a sonar la canción, los participantes no fueron directo al beso, primero prefirieron acercarse, abrazarse y dejarse llevar por la música. Segundos después, la caricia en el rostro y el tan esperado chape.
La conexión entre ellos fue tan grande que después de la romántica escena, se fueron juntos, de la mano.
