Fernando Burlando sorprendió a todos ayer en Showmatch con una colorida y variopinta troupe que fue a apoyarlo en su segunda presentación junto a su pareja Barby Franco.
Del nutrido grupo se destacó Marila, la madre del letrado, quien se sacó una selfie con Tinelli, presionó a los miembros del jurado durante las devoluciones para que le pongan un 10 a su hijo y pasó de querer golpear con las muletas a abrazar a Marcelo Polino. ¿Algo más? Sí, contó cómo era en sus épocas de maestra y directora de escuela.
La señora fue un verdadero boom en las redes sociales y hoy habló, vía telefónica, con Este es el show para comentar las sensaciones que le dejaron su noche consagratoria.
“¿Te parece que fui la revelación del programa?”, le preguntó a José María Listorti al comienzo de la charla. Y luego comentó que “lo quería matar a Polino y me terminé dando cuenta de lo bueno que es. Cuando le vi los ojitos y la cara, me inspiraron ternura. Ya no importa el cero que le puso, sé que mi hijo vale más”.
Cuando le preguntaron sobre si creía que el periodista y enemigo número uno del abogado necesitaba una pericia psicológica, como sugirió el letrado, respondió con humor: “A lo mejor, sí. A mí me pareció normal”.
Tras confirmar que seguirá yendo al piso cada vez que bailen Burlando y Barby, se refirió a la duda del millón: ¿quiso darle un piquito a Marcelo Tinelli? “No pensé en darle un beso en la boca, sino uno de cariño, como de madre a hijo”.
Mirá el video con la entrevista completa.
