La mesa está lista tuvo entre sus invitados de este lunes a una estrella que bien puede considerarse internacional. Nacido en España, elegido como modelo de diversas marcas del mundo y conocedor de prácticamente el planeta entero, Iván de Pineda compartió las experiencias más insólitas que vivió en sus interminables viajes por el globo. El referente de la moda – y de la cultura – reveló, entre risas, cuáles fueron los platos más extraños que probó, contó cuántas veces le dio la vuelta a la Tierra y detalló algunas historias felices (y otras que no lo fueron tanto).
El glamour del modelo se vio algo opacado cuando no tuvo otro alternativa más que contar cuál fue la comida más extraña que probó durante uno de sus viajes alrededor de la Tierra. “Fuimos a hacer una entrevista al Amazonas a un tipo que sabe mucho del lugar; que cría anacondas en el jardín de su casa. Nos llevaron a una moloca, Nos contaron cómo se cazaban monos con cerbatana”, comenzó Iván con su insólita anécdota.
“De lo más raro que comí fueron los ‘mojojoy’, que son larvas gigantes de escarabajos”, comentó el modelo ante la mirada atónita del equipo de Germán. Iván explicó que el particular y poco apetecible alimento resulta vital para la población nativa del Amazonas. “Es lo que consumen durante el día porque tienen una jornada con mucho desgaste de calorías. Entonces, con 5 o 6 de esos ‘mojojoy’ ya pueden vivir”, explicó.
José Chatruc no pudo contener su curiosidad — y la impresión que le causó el relato – y consultó al modelo: “¿No te da miedo comer esas cosas?”. El exfutbolista aclaró que disparaba su incógnita en condición de “hipocondríaco”. Iván, entre carcajadas por la intervención del exdeportista, confesó que ante aquellas situaciones es fundamental ponerse en la piel de la gente que habita el lugar y considerar sus recursos. Así, contó el modelo, “se aprende muchísimo de la cultura”.
Sin embargo, la experiencia de Iván de Pineda con su programa Resto del mundo emitido por El Trece no sólo se acota a comer platos extraños. El modelo logró realizar unos 500 viajes y, según su cálculo, gracias a este trabajo, logra dar la vuelta al mundo tres o cuatro veces al año. El conductor, se sabe, está más que preparado para su prestigiosa labor, ya que habla cinco idiomas, a saber: español, inglés, italiano, francés y portugués.
IVÁN, EL IRRESPETUOSO
El momento más desopilante del programa durante la visita del modelo se vivió cuando el productor general de Resto del mundo, Hernán Valenzuela, se comunicó vía telefónica con La mesa está lista y detalló algunos de los sucesos más insólitos vividos por Iván durante sus numerosos viajes.
“Iván, en el país más budista del mundo, no respetó las costumbres”, disparó, cómplice, Valenzuela. De Pineda se vio obligado a aclarar que en Tailandia se considera una falta de respeto el mostrar las plantas de los pies ante la imagen de Buda. Algo que no pudo controlar en un momento muy particular de su viaje.
“Después de recorrer todo y de dormir cuatro horas por día, yo no podía más. Estábamos con 40 grados. Pero cuando uno reza, no se muestran las plantas de los pies. Entré a una combi, puse los pies para arriba y me empiezan a mirar mal. ‘¡De qué Buda me estás hablando!’, digo, y el conductor me señala el espejo retrovisor. Había un Buda colgando”. Presumiblemente, a partir del la experiencia, el joven trotamundos aprendió a ser aún más cuidadoso. Aunque algún detalle siempre se puede escapar.
