Mariana Brey y Pablo Melillo recibieron en su casa al móvil de Los ángeles de la mañana y contaron cómo viven las horas previas a la llegada de su hija Juana.
"¿Se porta bien Mariana? ¿Está tranquila?", quiso saber Ángel De Brito. "Si querés que me separe ya, cuento la realidad. El fin de semana la pasó muy mal", comentó el piloto.
"Ella sigue andando en bicicleta, haciendo gimnasia. ¿Hasta cuándo?", preguntó el conductor. "El médico le dijo que mientras ella pueda, que lo haga. No puedo decir qué está bien y qué está mal, pero me parece raro", admitió Melillo.
"Me manda mensajitos diciendo ‘estás loca’", acotó Brey. "Me rompe las bolas todo el tiempo y después hace todo lo que hace…", sostuvo, entre risas, el empresario.
"Me encanta lo mal que se llevan. Están mostrando una pareja real", observó Yanina Latorre.
"¿Se nota mucho? Yo trato de disimularlo. Él está aprendiendo a trabajar algo que es muy importante para cualquier ser humano como la tolerancia y la aceptación", señaló Mariana. "Hace dos años que estoy trabajando la tolerancia", salió rápido al cruce Melillo.
"No me gusta contar infidencias, pero el otro día fuimos a comer a la casa y él es un divino. Preparó todo y ella tirada como una reina pidiendo cosas", recordó Karina Iavicoli.
"Por momentos siento que ella es municipal y yo soy su empleado", resumió Pablo. "Son las mejores parejas: matriarcado con cadete", sentenció Yanina.
