En el informe de PPT, Jorge Lanata compartió el estado de la negociación entre el Gobierno Nacional y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Además, el periodista detalló los términos que el organismo le pidió a Martín Gúzman para llegar a un acuerdo, y qué es lo que está dispuesto a ofrecer Alberto Fernández en este sentido.
Lo cierto es que la negociación empezó a tomar forma en la cumbre del G-20, que se realizó en la capital italiana de Roma. Allí, mientras el presidente se reunió con Kristralina Gueorguieva, Martín Guzmán se juntó con Julie Kozack, la negociadora del Fondo designada para nuestra región.
El primer mandatario le propuso a la gerente del FMI que el Congreso votara una ley que pusiera las reglas para el acuerdo. En esta misma línea, Lanata indicó en PPT, que para la directora su ofrecimiento significaba imponerle un acuerdo propio al Fondo Monetario Internacional lo que nada tenía que ver con una negociación.
Por este motivo surgió la idea de un programa económico plurianual que el gobierno va a mandar al parlamento para imponer algunas pautas que faciliten la llegada a un trato con el Fondo Monetario Internacional, pero con cierta flexibilidad. Fue entonces que Cecilia, la periodista que acompañó a Lanata durante el informe del día, contó que se le dio al Ministro una hoja, que sería como una especie de guía, para encaminar el acuerdo con el FMI.
Las dificultades de la negociación entre el Gobierno Nacional y el Fondo Monetario Internacional
A la hora de referirse a los duros números y a las diferencias técnicas que dificultan la negociación entre el FMI y el Gobierno Nacional, PPT subrayó en primer lugar la importancia de la proyección del crecimiento: “Argentina plantea que la economía va a crecer el año que viene 4%, y el Fondo le dice que no tiene dólares para crecer más del 2,5%”.
“Menor crecimiento, en definitiva, implica más ajuste porque lo que está pensando el FMI es la recaudación que vos calculás con un crecimiento del 4% es mentirosa”, señaló la periodista del programa. Ese ajuste equivaldría a 2.700 millones de dólares, casi un punto del PBI.
El segundo ítem es el déficit fiscal. El organismo está dispuesto a darle un plazo de tres años a la Argentina para que llegue a un déficit cero, pero le pide arrancar el año que viene con uno del 2,5%. Y, en tercer lugar, el FMI también pide que el país tenga un cronograma concreto para recomponer las reservas perdidas.
