Solana y Lautaro son dos niños bailarines, oriundos de la provincia de Santiago del Estero. A pesar de su corta edad, anoche, demostraron ser eximimios y apasionados intérpretes de la música ciudadana, algo que emocionó tanto al público como al jurado que los aplaudió de pie y hasta derramó alguna que otra lágrima.
En una nueva gala de Tango, los chicos regresaron al programa, esta vez, dispuestos a dar cátedra al ritmo de la Milonga (Luciérnaga). Pero antes de lanzarse a la pista revelaron que había recibido un regalo muy especial de parte de Marcelo Polino, un presente por demás simbólico que dejó en evidencia cuánto habían emocionado al implacable periodista.
Señalando a su compañero de baile, Solana le dijo a Marcelo Tinelli: “Este señor, lleva puesto un moño que le regalo ese señor”, ahora apuntando a Polino, a quien se lo notaba conmovido. Ojo, porque el “moño de Polino” es marca registrada.
Tanto Solana como Lautaro sueñan con poder competir el el Mundial de Tango infantil que se lleva a cabo, el próximo año, en Colombia.
