Antes de bailar, Julieta Gómez pidió cantar y entonó dudosamente “No llores por mi Argentina”. “Fue con melodía propia la canción”, ironizó Reina Reech. Silvina Escudero le preguntó si era en serio o había sido una broma. Junto a Pablo Moiño, Julieta bailó y después -indagada por Santiago del Moro- admitió haber salido con Matías Alé, aunque “la verdad, no la pasé bien”. Luego se emocionó saludando a su madre y se quejó de que algunos compañeros la discriminaban por su condición de madre. Marcelo Polino le reconoció que “estás acá por tu hija y no sólo para hacerte la linda”.
