El Registro Civil de la ciudad de Buenos Aires ya no exige un trámite especial para aceptar nombres poco usuales. De esta manera, los padres ya tienen vía libre para elegir el nombre que quieran para sus bebés. Hay una sola limitación: que no "lesione el honor" del niño ni resulte ofensivo.
Hasta el año pasado, la elección del nombre debía coincidir con alguna de las 9.807 opciones incluidas en un listado oficial. Si los padres querían bautizar a su hijo cde otra manera, tenían que pedir una autorización especial.
Algunos de los antecedentes más curiosos en los distritos en los que esta medida ya fue aprobada son Mariposa, Colores, Río y Venecia. Pero también hay otros, más llamativos aún, vinculados con nombres propios que en rigor son apellidos de personas famosas, por ejemplo, Messi. En ese caso, el padre del niño confesó que lo que más deseaba era ser "el padre de Messi".
Como no podía ser de otra manera, también fueron furor los personajes de Las mil y una noches. Obviamente, no faltaron los Onur y las Sherazade.
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