Una cárcel de violadores. En Senillosa, Neuquén, existe un programa especial del servicio penitenciario federal con el que se busca que 125 condenados por violación no reincidan y puedan reinsertarse en la sociedad.
Sebastián Domenech viajó a Neuquén y explicó que hay 510 presos en todo el país por agresiones sexuales, de los cuales 250 recibieron una condena y 125 de ellos integran el programa de Senillosa.
Ariel Cuenca, director de la cárcel, explicó a Telenoche que "se busca modificar conductas, hábitos y trabajar sobre los valores. Tenemos que influir positivamente sobre los internos tratando de que ellos respeten la ley".
En la cárcel, los presos tienen celdas individuales, se les asignan actividades educativas y tienen tareas laborales.
