Mario Pergolini renunció este miércoles a su cargo de vicepresidente primero de Boca Juniors tras su enfrentamiento con el Consejo de Fútbol encabezado por Juan Román Riquelme, que impulsó una cuenta de Instagram y youtube del predio de Ezeiza que choca directamente con el canal oficial del club creado por el renunciante vicepresidente.
“Hola, qué tal, un saludo especialmente para la gente de Boca, estoy acá para confirmar que presenté la renuncia indeclinable a la vicepresidencia primera del club”, arrancó Pergolini a través de un video que subió a su cuenta de Instagram bajo el título "Un pequeño mensaje aclaratorio".
“Le agradezco a todos los socios e hinchas haberme dejado ser su vicepresidente durante este tiempo. La verdad que no me he peleado con Jorge (Ameal, el presidente), persona que quiere lo mejor para Boca, tampoco con Riquelme, alguien que quiere también lo mejor para Boca, qué decir, pero uno tiene que entender que a veces lleva propuestas que no se pueden llevar a cabo, o que no encuentra las formas de que lo acompañen a uno y bueno, hay que saber dar el paso al costado”, concluyó Pergolini sobre su salida del club.
Al parecer, la gota que rebalsó el vaso de la paciencia de Pergolini fue esa cuenta de Instagram y youtube que se llamará @Bocapredio, que el renunciante vicepresidente sintió como competencia del canal oficial de Boca en youtube, ya que de hecho nunca le abrieron el predio de Ezeiza, algo que el Consejo le impidió.
Pergolini quería que los periodistas del canal oficial hicieran notas con el plantel en el predio, pero el Consejo no lo permitió.
En el canal oficial solamente hablaron desde su creación hace más de un mes el mencionado Ameal y el propio Pergolini, pero ningún futbolista, ni nadie del cuerpo técnico ni de ninguna otra área de la institución.
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Vale recordar que hace 15 días se los vio a Pergolini y Riquelme juntos viendo el partido de reserva con Talleres que terminó 2 a 2, donde el vicepresidente "uno" había ido a limar asperezas con el vice "dos".
Es que en Boca ya Pergolini remarcaba que el predio de Ezeiza, a donde concurren diariamente Riquelme y sus colaboradores, es como "un segundo club", porque ellos difícilmente se hagan ver por la sede de la calle Brandsen, a no ser los días de los partidos.
Lo curioso del caso es que, al irse el primer vicepresidente, su lugar lo debe ocupar el segundo, que no es otro que el propio Riquelme.
El próximo lunes la Comisión Directiva debe resolver si le acepta la renuncia o no, pero Ameal, que atraviesa la crisis más importante desde que asumió el 20 de diciembre de 2019, le pedirá que revea la situación, aunque suena difícil que Mario logre dar marcha atrás en su determinación.
