Popeye, el sicario de Pablo Escobar, se refirió al narcotráfico en nuestro país y dio un dato alarmante. “Mucha gente de la mafia colombiana está comprando tierras en la Argentina”, aseguró. Y agregó: “miren su país, que todos los días se parece más a Colombia”.
Luego, el acusado de más de 250 asesinatos afirmó que “Pablo Escobar no mató al hijo de Carlos Menem”.
El otro patrón del mal estuvo 22 años en prisión, le confió a Ricardo Canaletti: “para mí la cárcel es un modo de vida. Era mi hogar, mi casa, un lugar donde luchar. Me quisieron matar, hubo 7 atentados en mi contra. No me mataron porque me sabía defender. Era un rey, tenía dinero y me rodeé de buena gente”.
Finalmente, sentenció que “a Pablo Emilio Escobar Gaviria lo mató la Policía Nacional de Colombia, fue el mayor Hugo Aguilar Naranjo”.
Mirá la entrevista en el video.
