Caminar, es un acto cotidiano que muchas veces pasa desapercibido y podría esconder el secreto de una vida más larga y saludable. Así lo afirman especialistas que destacan una técnica de origen japonés conocida como la “caminata japonesa”, un método que combina simplicidad, constancia e intensidad, y que está revolucionando la forma en que entendemos el ejercicio físico.
A diferencia de las caminatas convencionales o del famoso objetivo de los 10.000 pasos diarios, esta técnica propone un enfoque distinto: no se trata de cuánto caminás, sino de cómo y con qué ritmo lo hacés. Según los expertos, su práctica regular, de al menos cuatro veces por semana durante 30 minutos, puede aportar beneficios que van desde mejorar la salud cardiovascular hasta fortalecer el sistema inmune y retrasar los signos del envejecimiento.
Cómo es el truco de la caminata japonesa que ayuda a la salud
La caminata japonesa se basa en intervalos de velocidad controlados. El plan incluye un breve calentamiento inicial de 3 a 5 minutos, seguido por cinco ciclos de caminata rápida (3 minutos cada uno), intercalados con otros 3 minutos de ritmo pausado. Para cerrar, se realiza una caminata de recuperación de 5 minutos. Esta alternancia no solo estimula el sistema cardiovascular, sino que también activa el metabolismo, mejora la resistencia y fortalece músculos y articulaciones.

Lo mejor de este método es que no requiere de equipos especiales ni de un entorno específico. Solo necesitás un buen par de zapatillas, ropa cómoda y tu celular para usar de cronómetro. Puede practicarse en parques, veredas o cualquier lugar donde caminar sea posible.

Los beneficios de este truco japonés
Entre los múltiples beneficios que se le atribuyen a esta técnica figuran:
- Reducción del riesgo de ACV y enfermedades cardíacas.
- Mayor calidad del sueño.
- Disminución del estrés y mejora del estado de ánimo.
- Fortalecimiento del sistema inmunológico.
Además, es ideal para personas mayores o para quienes no pueden realizar ejercicios de alto impacto, aunque siempre es clave consultar con tu médico. Al enfocarse en el ritmo y no en la cantidad de pasos, la caminata japonesa se adapta a diferentes edades y condiciones físicas, convirtiéndose en una alternativa accesible para mejorar la calidad de vida. ¿El único requisito? Constancia y media hora de tu día.