Con la llegada del frío, es común que muchas personas experimenten molestias musculares, rigidez en las articulaciones y una sensación general de pesadez corporal. El invierno suele agravar los dolores crónicos y afectar la circulación, especialmente en quienes ya padecen afecciones. En ese contexto, el jengibre se presenta como un aliado natural y eficaz para aliviar estas dolencias.
Lo cierto es que el jengibre se utiliza desde hace siglos en la medicina tradicional por sus propiedades antiinflamatorias, analgésicas y termogénicas. Su compuesto activo principal, el gingerol, actúa reduciendo la inflamación y favoreciendo la circulación sanguínea. Esto lo convierte en una opción ideal para quienes buscan una alternativa natural para combatir los efectos del frío en el cuerpo.
Una de las formas más comunes de consumir jengibre es en infusión. Basta con hervir unas rodajas frescas de raíz de jengibre en agua durante 10 a 15 minutos, colar y beber. Se puede agregar limón o miel para potenciar sus efectos y mejorar el sabor. Esta preparación ayuda no solo a calentar el cuerpo desde adentro, sino también a desinflamar y aliviar dolores musculares o articulares.
También es posible incorporar jengibre fresco rallado en sopas, guisos, licuados y jugos o usarlo seco en polvo para condimentar comidas.
Para quienes buscan una aplicación tópica, también existen aceites o cremas con extracto de jengibre que pueden aplicarse en las zonas doloridas, promoviendo la circulación y brindando alivio localizado.
Si bien el jengibre es seguro para la mayoría de las personas, se recomienda consultar con un profesional de la salud antes de incorporarlo de forma regular.
Cómo consumir jengibre en el mate
Incorporar jengibre al mate es una forma sencilla y efectiva de aprovechar sus propiedades antiinflamatorias y estimulantes durante el invierno. Una opción práctica es agregar pequeñas rodajas de raíz de jengibre fresco directamente en el termo o en el mate, junto con la yerba. A medida que se ceba, el agua caliente libera sus compuestos activos.
Otra alternativa es infusionar previamente el jengibre en agua caliente y utilizar esa preparación como agua para cebar el mate. El jengibre se infusiona dejando hervir unos minutos las rodajas o el jengibre rallado. Este método permite intensificar el sabor y potenciar los beneficios del jengibre, como la mejora en la circulación y el alivio de dolores articulares. Además, se puede combinar con otros ingredientes naturales como cáscara de limón, menta o canela para sumar aroma y propiedades.
